La escritora Marta Acevedo, creadora del proyecto original de Rincones de Lectura de la SEP, cuenta que Rincones de Lectura no sólo hizo llegar libros a las escuelas a través de sus cuatro colecciones, sino que llevó una manera de pensar, una filosofía de la lectura.
En 1986, refiere “hicimos a los maestros sugerencias de sentido común: no realizar actividades obligatorias a partir de los Libros del Rincón, programar 40 minutos a la semana para que los niños leyeran a placer, escribir a partir de las lecturas y permitir que los niños escogieran el libro que quisieran leer. Deseábamos promover las ganas de leer libros, de leer por gusto.
Y en su libro “El universo está contento”, Marta Acevedo sostiene que a veces cuesta trabajo escribir, es algo que se aprende con el tiempo y mucha práctica. También se aprende leyendo mucho, todo lo que podamos.
Escribir es algo que sirve mucho. Y, cuando nos sale bien, nos llena de alegría. ¿Escribir para qué? Escribir para mí, para otros, para aprender a comunicarse, para escuchar las palabras, para acordarnos.
En su otro libro “Amores sabores lectores”, parte de la reciente oferta viva para la selección de libros de las Bibliotecas Escolares y de Aula, Marta Acevedo nos pregunta, ¿a qué saben las palabras? No lo sabremos si no las probamos, si no las sentimos en la boca, si no las leemos o las decimos o las escuchamos, si no las escribimos.
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